“Los productos y los países a los que Chile exporta ya tienen aranceles bastante bajos”

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“El TPP va a ser un acuerdo plataforma, el mejor en existencia ahora para participar en la economía mundial”, dice el experto.

Gary Hufbauer es un ex miembro del Departamento de Tesoro de EEUU y actual senior fellow del Peterson Institute. Desde esta posición, participó en el estudio sobre el impacto económico del TPP para los países miembros y ha escrito una serie de publicaciones sobre el comercio en la cuenca del Pacífico. Aunque reafirma que los beneficios para el país derivados del acuerdo serán bajos en el corto plazo, asegura que «sería un enorme error histórico no ratificarlo».

El TPP probablemente se convertirá en la base para un acuerdo mucho más amplio, a medida que se incorporen países con los que Chile ahora no tiene convenios y que mantienen altas barreras al comercio. Si nuestro país se incorpora desde el comienzo, afirma, estará en mejor posición para cosechar esos frutos.

– La principal razón es que Chile ya tiene acuerdos de libre comercio con los mayores países que participan de este acuerdo. De la manera en que los economistas y este modelo estiman los beneficios de un acuerdo comercial, la mayor parte del incremento, más de la mitad, proviene de la competencia adicional por importaciones. Este factor impacta a través de una serie de mecanismos, como menores precios para los consumidores, mayor competencia para las empresas que se traducen a su vez en un aumento de la productividad, y una mayor variedad de importaciones -como partes para maquinarias y equipos electrónicos- que se ajustan mejor a las necesidades de la industria local. Pero como Chile ya tiene acuerdos con muchos de estos países ya ha recibido la mayor parte de esas ganancias en competencia por importaciones.

– Pero tampoco se beneficia mucho por las exportaciones…
– Sí. Lo que ocurre es que muchos de los países con los que Chile no tiene ahora un acuerdo de libre comercio, en general tienen aranceles y restricciones bastante bajos para el tipo de productos que Chile exporta, especialmente los productos minerales, como el cobre. Chile también exporta productos agrícolas. Esa es probablemente el área donde los aranceles y las restricciones de cuotas verán las mayores rebajas en los países con los que Chile no tiene acuerdos de libre comercio actualmente así que ahí habrá cierta ganancia y quizás también para algunos productos industriales. Pero como un todo, en el lado de las exportaciones, los beneficios serán bajos.

– Chile ha intentado posicionarse como una economía de servicios. ¿No tiene efecto el TPP en este sentido?
– Aunque el modelo intenta incluir los servicios, esa es un área mucho más difícil de medir. Podría ocurrir que debido a la liberalización de servicios en el TPP haya más inversión de compañías extranjeras en Chile para atender desde ahí al resto de Latinoamérica. Esa es una posibilidad real y considerable, que probablemente no está bien medida en el modelo.

– Mirado así, entonces, ¿por qué debería Chile ratificar el TPP?
– Estas cifras son las mejores proyecciones disponibles sobre su impacto pero sabemos por estudios anteriores que es común que los efectos puedan estar subestimados. Pero más allá de eso, hay que tener en cuenta que las nuevas tecnologías están transformando la economía mundial rápida y radicalmente. El TPP va a ser un acuerdo plataforma, el mejor acuerdo en existencia ahora para participar en la economía mundial a medida que nuevos bienes y servicios y formas de hacer negocios son introducidas. Si Chile no participa se quedará afuera de este nuevo mundo.

Además, el TPP está pensado como un acuerdo «siempre verde», que seguirá expandiéndose en términos de cobertura de temas y de países. No tiene restricciones geográficas. Estados Unidos ya ha recibido acercamientos de Corea, Filipinas, Tailandia, Indonesia y Colombia, países a los que les gustaría unirse.

Algunos de estos países tienen aranceles y barreras bastante altos para muchos productos. Indonesia, por ejemplo, es uno de los países más cerrados. Y es posible que en un plazo de diez años puedan sumarse China y Brasil.

Si Chile está en el acuerdo desde el comienzo, recibirá los beneficios del acceso a mercados con los que ahora no tiene un acuerdo y que tienen altas barreras. Si Chile no ratifica el acuerdo sería un enorme error histórico, pero en las democracia pueden cometerse errores y con frecuencia así ocurre.

Fuente: Diario Financiero