Barreras no arancelarias para envíos chilenos caen casi 25% en 2015

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El año pasado se registraron 139 medidas de este tipo, frente a las 184 vistas en 2014, según catastro anual elaborado por la Direcon. América del Sur concentró la mayor cantidad de obstáculos, con 52 impedimentos que equivalen a 37,4% del total.

Las exportaciones chilenas enfrentaron en 2015 la cantidad más baja de obstáculos no relacionados con los aranceles aduaneros en al menos cinco años.

Según la décimo sexta versión del Catastro Nacional de Barreras No Arancelarias, los envíos nacionales debieron afrontar 139 medidas de este tipo en 36 países el año pasado, un descenso de 24,5% respecto de las 184 registradas en 2014. La cifra corresponde al menor nivel desde al menos 2011.

El informe, que antes estaba a cargo del Ministerio de Economía y que este año pasó a la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), incluye sólo las normas que afectan a los bienes. Las medidas que impactan a los servicios y las inversiones fueron excluidas porque su naturaleza es distinta.

En cuanto al tipo de impedimento, la mayor parte son “obstáculos técnicos al comercio” con un total de 58. Esta categoría se refiere a los los reglamentos y procedimientos de prueba y certificación que debe cumplir un producto.

Más atrás están las “Medidas sanitarias y fitosanitarias”, con 32. Estas son las normas sobre la inocuidad de los alimentos, la sanidad de los animales y la preservación de los vegetales.

En tercer lugar aparecen las “licencias no automáticas y otros”, con 13. Estos tres segmentos agrupan un 74,1% de las trabas reportadas en 2015.

América es el continente que concentra la mayor cantidad de limitaciones no arancelarias en los últimos cinco años. En 2015, hubo 52 disposiciones en América del Sur, un  37,4% del total.

Andrés Rebolledo, jefe de la Direcon, explicó que el fenómeno en la región responde a una cuestión histórica. “Para algunos países el comercio exterior tiene una lógica administrada para cumplir otros objetivos de carácter de desarrollo productivo nacional”, expresó.

En todo caso, la autoridad cree que la tendencia en el bloque está cambiando.

Arancel cero

A juicio de Rebolledo, este tema “es especialmente relevante ahora y en lo que viene en el comercio internacional, porque estamos llegando al punto en que los acuerdos comerciales se están consolidando y están llegando a arancel cero”.

El arancel promedio mundial ha bajado desde 5,34% en 1997 a 2,88% en 2012, de acuerdo al Banco Mundial. En el caso de Chile, el arancel promedio efectivo en 2014 fue cercano a 0,3%.

“Hoy día, cuando los aranceles pierden relevancia en el comercio internacional, las medidas que afectan al comercio muchas veces ni siquiera están en la frontera, sino que están adentro de la frontera”, afirmó.

El economista aclaró que las barreras no arancelarias no necesariamente contravienen los estándares fijados por organismos  como la Organización Mundial de Comercio, ya que algunas medidas, como las fitosanitarias, están reconocidas.

La autoridad subrayó que el objetivo de este catastro es “colocar en la agenda comercial y de las negociaciones comerciales el hecho que de manera creciente el foco prioritario debería pasar desde el arancel a las normas no arancelarias”.

En este sentido, precisó que el Acuerdo Transpacífico cubre esta materia al incluir un capítulo de medidas técnicas. El pacto “genera normas, disciplina, en definitiva, certidumbre al comercio”, sostuvo.

A pesar de esto, es probable que este tipo de medidas aumente en el futuro debido a la mayor relevancia que están tomando asuntos como la inocuidad alimentaria y el cambio climático.

“En la medida que estos temas emerjan como más importantes, van a tener un efecto creciente en el comercio internacional”, aseguró Rebolledo.

Fuente: La Tercera