CMN exige no arriesgar la condición de Patrimonio de Valparaíso por T2

1

Organismo advierte que Unesco podría eliminar de su lista al sitio patrimonial porteño si ve resentido su valor universal excepcional.

El Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) advirtió que la Unesco podría eliminar a Valparaíso de la lista de Patrimonio de la Humanidad si los impactos del frente de atraque para barcos súper post-Panamax, que se proyecta construir frente al sitio que goza de tal declaratoria, terminan por afectar su valor universal excepcional.

La alerta la emitió en un documento de 45 páginas en el que realiza sus últimas observaciones al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) presentado por la empresa Terminal Cerros de Valparaíso (Tcval) y que fuera incorporado el lunes de la semana pasada al sistema de evaluación ambiental.

El escrito, firmado por la secretaria del CMN, Ana Cárdenas, exige a Tcval que «asegure que el proyecto no significará ningún riesgo al título de Valparaíso como Patrimonio de la Humanidad». En este, desestima el argumento de la empresa en cuanto a que tal peligro sería inexistente, por cuanto el proyecto no contempla obras al interior de las 23 hectáreas del sitio que ostenta esa categoría. «No corresponde que el titular ofrezca estas seguridades, pues la eliminación de cualquier sitio de la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco es competencia del Comité de Patrimonio Mundial de dicho organismo internacional, fundado en la pérdida del valor universal excepcional del bien, incluidas su autenticidad e integridad», dice.

En su EIA, la empresa argumenta que el proyecto que involucra una inversión de US$ 500 millones fortalece la identidad de Valparaíso, al expandir la actividad portuaria que, precisamente, fue la que legó el patrimonio material e inmaterial valorado por la Unesco.

Precisa, además, que el área en que construirá la explanada de atraque colinda solo en 45 metros y enfrenta en otros 169 al sitio de Patrimonio Mundial, aunque hay otros 900 metros lineales que son contiguos a zonas de conservación histórica.

Pero en el documento, el CMN adscribe a las conclusiones del estudio de impacto patrimonial que, a pedido de la Unesco, se le efectuó al proyecto.

Esto es que el nuevo frente de atraque tendrá un impacto «alto, permanente e irreversible» en el sitio protegido, debido a la infraestructura de gran escala sobre la cual se apilarán contenedores que obstruirán la vista, desde y hacia la bahía, y alterará las relaciones del anfiteatro geográfico del puerto. Según el CMN, ello no es «mitigable».

El organismo descartó que el paseo peatonal en altura en el borde costero, que tiene una inversión de US$ 36 millones y que fue ofrecido por la empresa portuaria, sea una compensación frente a los impactos visuales del llamado Terminal 2.

Fuente: El Mercurio